Retro Save + Inspiration
Pues como decía soy Juan,profesor de instituto en una ciudad de España,tengo unos treinta años y doy clases a grupos mixtos de chicos y chicas,de físico no estoy nada mal y siempre aparento dos o tres años menos de los que tengo.El caso es que bueno uno no es de piedra y algunas alumnas...umm...digamos que te lo ponen en bandeja.Tampoco voy a decir aquí que me las tenga que quitar de encima como si fueran moscas,no,no es eso.Pero yo tengo un trabajo que respetar y si me pillarán teniendo algo con alguna de mis alumnas lo primero es que me expulsarían del instituto y lo segundo es que seguramente me costaría mucho encontrar trabajo de lo mio.¡Que coño!Para eso me tiré varios años sacandome una carrera.Y eso suponiendo que no me viera en la disyuntiva de tener que cambiar de ciudad e incluso podría tener problemas legales.
Sin embargo,tengo una alumna a la que le doy clases de repaso,se llama Raquel,nunca me había fijado en ella especialmente,es de las que estudian poco,tiene 17 años y también se pela alguna clase.Pues bien,como decía le doy clases de repaso.Durante las clases estamos solos en la casa,sus padres trabajan.Desde que empezé a ir a su casa ella a menudo me hablaba de cosas que no tenían relación con los estudios,que si su novio,que si el fin de semana,yo le seguía la corriente y no desviaba la conversación constantemente hacia los estudios,a fin de cuentas sólo le cobraba a diez euros la hora,me venían bien pero tampoco es tanto y me sabía mal estar todo el rato presionandole con los estudios.
Además pronto ella empezó a hablar de temas relacionados con el sexo y yo empezé a fijarme en sus labios pulposos,sus pechos bastante abundantes,sus cachas jamoneras.De gorda nada,¿eh?Pulposa,eso si.Me hablaba de si ese fin de semana estando en la discoteca se había salido al coche con un chaval y se lo habían montado allí.Me hablaba que si no le gustaba el preservativo(a mi tampoco,le decía yo),que no era lo mismo,que no se notaba la piel caliente¡Dios!Me estaba empezando a buscar las cosquillas,yo no quería pero ella se estaba dedicando a ponerme a cien.Y las clases de repaso seguían y yo empezaba a ir cada vez con más ilusión.Ya practicamente no hacíamos repaso,sólo hablar de temas calientes.
Por fin un día,ya no pude más,le tiré morreo y mano a las ancas¡gloriosas ancas que prometían mil placeres!Ella me apretó fuertemente el paquete,que ya pedía más guerra que Sadam.En menos que canta un gallo estábamos sobre un sofá de ese salón,ella con el pantalón de chandal quitado,yo sin mis vaqueros.Ella misma se sentó a horcajadas sobre mi misil de combate.Yo veía su raja devorar mi apéndice viril.Y empezó a cabalgarme y a moverse a un lado y a otro y a hacer círculos con las caderas.Por supuesto,allí el tema "condón" no apareció para nada.Los dos jadeábamos como animales en celo sudorosos,hasta que yo no pude más,la empuje dos palmos hacia atrás y eyaculé en su vientre. Acabamos en el suelo chupeteandonos mutuamente por todo el cuerpo y al rato haciendo el sesenta y nueve. Su sexo estaba delicioso y ella succionaba el mio como un rico helado de piña para el niño y la niña...CONTINUARÁUn Relato de : Espigado-Caracortada