
En muchos aspectos, Marilyn era como todos nos la podemos imaginar. Sin embargo, en otros muchos (muchísimos) me ha sorprendido. Aunque sus papeles en Los caballeros las prefieren rubias o en Cómo casarse con un millonario reflejan parte del carácter de Marilyn, desde luego era muy distinta.
Sin embargo, una cosa muy curiosa que me ocurre leyendo la biografía es que, aunque entienda perfectamente porqué conseguía atraer todas las miradas, a veces olvido lo perfectamente bella que era: