R.M.Pronto, muy pronto, Rose McGowan va a ser la chica de moda.Rose, una Betty Boo contemporanea, sexual y arrolladora, siempre me ha parecido fascinante. Poseedora de una estética envidiable, sus labios rojos y su piel extremadamente blanca la situan dentro de la categoría de actrices vampiras que innundan la pantalla con su presencia.Nacida en Florencia, pasó su infancia viajando por Europa de comuna hippie en comuna hippie, con sus padres, miembros de la secta los Hijos de Dios. A los 15 años, ya afincada en EE.UU y harta de tanta locura, se emancipó, empezó su carrera como modelo e hizo algún pinito cinematográfico. Pero no fue hasta 1995 cuando protagonizó la película de culto The Doom Generation y todos los ojos comenzaron a fijarse en ella.Alcanzó la fama con el papel de Paige en la serie Embrujadas (sustituyendo a la siempre poco afortunada Shannen Doherty) y sobretodo, se hizo popular por su romance con Marilyn Manson, antes de la aparición de Dita von Teese (nótese el gran gusto de Manson a la hora de elegir mujeres).Ahora ha llegado la hora de Rose. Su doble papel en Grindhouse, el nuevo proyecto de Quentin Tarantino y Robert Rodriguez ha conseguido devolverle el magnético glamour que ya demostró en su debut como Amy Blue en The Doom Generation. Estamos muy ansiosos por verla con una metralleta como pierna!!!